ÍNDICE

Prólogo          Por la Prof. Emilia E. Menotti           1
Capítulo I       El mito de la objetividad       5
Capítulo II      El gobierno radical inminente. Las dos líneas enfrentadas      9
Capítulo III         En el ojo de la tormenta   21
Capítulo IV        Frondizi y la historia nacional        25
Capítulo V         Presidente del partido       31
Capítulo VI        El 13 de noviembre: vencedores y vencidos. El liberalismo en acción        37
Capítulo VII        "A los 50, comprendí los designios del Cielo". "¡Sepa que los respaldamos firmemente!" 47
Capítulo VIII       Ubicación inteligente del unionismo          51
Capítulo IX        Elegir candidato y elegir Presidente           53
Capítulo X         Balbín y Frondizi con Aramburu: una cena dramática        61
Capitulo XI        El grosero sofisma del voto directo           65
Capítulo XII       Balbín renuncia a la intrasigencia   75
Capítulo XIII       Reunión del Comité Nacional en San Juan           79
Capítulo XIV      El precandidato de la intransigencia          83
Capítulo XV       ¿Por qué Frondizi? Un nuevo estilo político          85
Capítulo XVI      El gobierno y el continuismo         93
Capítulo XVII      Bombardeos al precandidato      97
Capítulo XVIII        La convención de Tucumán. El candidato a Vicepresidente      101
Capítulo XIX          El sacrilegio político de Balbín. ¿Qué "voto directo" autorizó el cisma? 111
Capítulo XX           Hacia la ruptura           119
Capítulo XXI          El candidato ante el país           123
Capitulo XXII         Los balbinistas y unionistas de la provincia       127
Capítulo XXIII        Sabattinistas y unionistas en luna de miel.         131
Capítulo XXIV       Grave acusación del Almirante Rial.     135
Capítulo XXV         Las ideas de Frondizi. Las injurias de los otros.     139
Capítulo XXVI       La elección de convencionales.            143
Capítulo XXVII      Las dos líneas, otra vez.           147
Capítulo XXVIII     Ambos candidatos, frente a frente.       151
Capítulo XXIX       Rogelio Frigerio y la revista "Qué".       157
Capítulo XXX         La leyenda del "pacto".            161
Capítulo XXXI       Nos importó el país.     175    

PRÓLOGO

Francisco Hipólito Uzal, escritor, poeta, político e historiador honda­mente comprometido con el país y con el tiempo histórico en que le toca vivir, nos entrega un nuevo trabajo en el que, mediante un riguroso y meditado estudio, establece la significación y alcance de un período de nuestro pasado histórico.
Para Benedetto Croce, el carácter de un pueblo debe buscarse "en su historia, toda su historia y nada más que su historia", reafirmando "la utilidad de un conocimiento que resuelve un problema surgido en el seno de la vida".
Uzal, coincidentemente, considera que la historia "es la relación coherente de los acontecimientos trascendentes... Así gravitan en nuestro pensamiento, en los enfrentamientos de la hora presente. La historia es siempre actual, porque es vida palpitante y fluyente. Por eso apasiona". Y nuestra historia reciente, tan conflictiva y dramática, plena de mutaciones, con su carga de violencia, resentimientos, frustaciones e intolerancia, necesita ser investigada para brindar a las generaciones del futuro, el material necesario para la reflexión y el análisis.
El autor tiene sobrados antecedentes para encarar con idoneidad el tema que propone, pues desplegó intensa actividad política desde su temprana militancia en el radicalismo. Fue tribuno de fogosa oratoria en asambleas y mítines callejeros y, en los debates que protagonizó en el Parlamento para obtener la sanción de leyes fundamentales, marcó con erudición, las grandes líneas evolutivas que el país esperaba de sus legis­ladores.
En sus partes sustanciales esta obra, bajo el título general de "FRON­DIZI - BALBÍN. HISTORIA DE UN ENFRENTAMIENTO", ofrece en realidad proyecciones más amplias que actualizan "una lucha más que sesquicentenaria", porque los acontecimientos narrados elucidan proble­mas políticos generados por el acoso que afronta un programa con impulso transformador, cuando se contrapone a la cortedad de miras escindida del real contexto histórico. Uzal no rehuye penetrar en las intimidades de los sucesos que describe, "por espinoso y urticante que sea el asunto", pues con ello pretende "aclarar más aún el panorama, aventando dudas y afrontando el tratamiento de un problema que ya está entrando en la categoría de tema histórico".
Con absoluta honestidad intelectual, no se presenta neutral ni indife­rentes; se convierte en testigo fiel y apasionado de una circunstancia que vivió intensamente. "Hemos evocado una lucha que fue también, por cierto, nuestra propia lucha -dice-. Confesamos sin eufemismos que estamos flagrantemente comprendidos en las generales de la ley. No podríamos ser objetivos, ni lo hemos pretendido tampoco. Si embargo de ello, procuramos ser ecuánimes, detrás de la circunspecta severidad en que enmarcamos nuestros juicios. Sólo el lector podrá decir si alcanzamos nuestro propósito".
Con similar honradez expresiva, Miguel de Unamuno encabezó un artículo con estas palabras: "Yo, señor mío, escribo con la sangre de mi corazón, no con tinta neutra, mis pensamientos, muchas veces contradic­torios entre sí; mis dudas, mis anhelos, mis sedes y hambres de espíritu; no redacto conclusiones, como cualquier secretario de cualquier Comi­sión".
Uzal se instala en un marco histórico que maneja con sentido arquitec­tural, y describe el proceso ideológico de la U.C.R., en el que son perceptibles normas, tendencias, principios y elementos circunstanciales que fueron causa y soporte de una aguda crisis política. El cotejo de intereses volcado en declaraciones y documentos a partir de la década del '40, refleja las tensas posiciones de sus signatarios, y trasluce el inevitable resquebrajamiento de la cohesión partidaria que ya prefiguraba una escisión.
Analiza con autoridad la diversidad de hechos, actitudes y predisposi­ciones, y maneja con prudencia e indisimulable pasión argentina el tablero de disensiones e intereses que fracturaron a la U.C.R. en una inevitable marca de sacudimientos políticos, sociales y económicos.
Se apoya en un profundo conocimiento de las fuentes y en su proximi­dad con el tema que expone, sin eludir la interpretación crítica o la reflexión de un observador interesado. Su visión integral de esta etapa de la política argentina, divide las corrientes de pensamiento en dos sectores representativos de la alineación de tendencias, "los representantes de la línea nacional, que viene desde los lueños orígenes de la nacionalidad, frente al liberalismo. Son dos líneas clásicas de nuestro alcance histórico, que despunta antes de Mayo y que prosigue en nuestros días. Cuyos protagonistas no siempre tienen conciencia plena del rol que están desem­peñando, ni siempre tampoco las situaciones son absolutamente tajantes. La realidad es generalmente más compleja que el esquema simple que podemos trazar en el papel (...). Corren los tiempos, y esas dos líneas subsisten, cualesquiera sean las características del momento y de los hombres que actúan. No es difícil identificarlas cuando se enfrentan; y el pueblo, pese a la precaria ilustración de la mayoría y a la distorsión con que con frecuencia se oculta o se desfigura la verdad, tiene un olfato formida­ble".
Uzal considera que esos grupos de fuerzas o corrientes ideológicas, cronológicamente definen o caracterizan cada ciclo histórico.
Balbín y Frondizi, sus coincidencias primeras e irreversibles disiden­cias posteriores sobre las directrices políticas que debían prevalecer en el seno partidario, compatibles con los intereses de la Nación y los diversos sectores que la integran, son el epicentro fundamental de esta apasionante indagación.
Con el deseo de alcanzar una verdad objetiva, con el grado de certeza que requieren tan profundas cuestiones, caracteriza al accionar de Balbín y su renuncia a la Intransigencia, y el surgimiento de Frondizi quien, en su esfuerzo por reestructurar un país quebrantado, diseñó un proyecto polí­tico y una metodología de acción imprescindibles para conjurar una extensa y diversificada crisis. "Frondizi -acota Uzal- fue un dirigente distinto de lo conocido hasta ese momento. Una expresión inédita en la conducción política, a cuya actividad se consagró con dedicación exclu­siva y pasión absorbente".
Los capítulos en que se divide este volumen, muestran en forma congruente los programas y ejecutorias de los dos protagonistas, y es en Arturo Frondizi en quien Uzal personifica la imagen de lo que considera debe ser un político, "un hombre de lucha, inmunizado contra el desalien­to. Realista e idealista al mismo tiempo, tendrá prudentemente sus pies afirmados sobre la tierra, pero sus esperanzas y ambiciones para la nación, han de estar muy alto y muy lejos, más allá del horizonte visible". (1)
Es esta obra que trasunta sinceridad, producto de la lucidez de su autor para el análisis y la evaluación estricta.
Uzal es concreto en sus definiciones, y en los múltiples temas que conforman la estructura del libro, rehuye la ambigüedad deliberada y los principios abstractos que horrorizaban a Disraeli.
Producciones de esta naturaleza poseen especial significación para quienes están interesados en la profundización de las ideas políticas de nuestra historia contemporánea y en esclarecer la personalidad de Arturo Frondizi, quien encarnó con singular energía y espíritu visionario, la Argentina del porvenir.
Profesora Emilia E. Menotti

Notas al Prólogo
(1) Uzal, Francisco Hipólito, "Sepa el pueblo votar". Prólogo del Dr. Raúl Matera, ed. Hudivc, 1982, p.12.